¿Sabes lo que compras? ¿Conoces realmente su composición?
El consumidor es soberano de decidir qué producto comprar, para ello necesita que la información recogida en las etiquetas o envases sea clara y entendible. Cada vez prestamos menos atención a los mensajes encantadores, maravillosos, “milagrosos” y más al tipo de producto, a sus ingredientes, lo que es en realidad más relevante. De ahí que hablemos de la importancia de leer las etiquetas correctamente.
Queremos entender y comprender qué es un antioxidante, un estabilizante o un edulcorante, para qué sirve y qué ventajas o inconvenientes pueden aportar / causar al organismo.
Y es que, en nuestra vida cotidiana estamos rodeados y consumimos a diario productos envasados. A pesar de ello, en la mayoría de las ocasiones no prestamos la debida atención a las etiquetas que identifican lo que compramos.
Leer las etiquetas es esencial para tomar decisiones sobre nuestra alimentación, están en juego nuestra salud y la de nuestros hijos. En una sociedad en la que trabajamos a diario por mantener un bienestar general y duradero, debemos empezar por cuidar nuestra alimentación.
Importancia de leer las etiquetas correctamente
Debemos tener siempre presentes tres aspectos importantes: la información nutricional, la identificación de alérgenos y el control de los aditivos…Veamos:
- Información nutricional precisa: las etiquetas contienen información valiosa sobre los ingredientes, el tamaño de las porciones, las calorías y el contenido nutricional de los alimentos. Al leerlas, sabemos exactamente qué estamos consumiendo y podemos tomar decisiones conscientes sobre nuestra dieta.
- Identificación de alérgenos: muchas personas sufren de alergias o intolerancias alimentarias. Las etiquetas proporcionan información clara sobre los alérgenos comunes presentes en los productos. Leer esta parte fundamental de la identificación de productos nos ayudará a evitar reacciones alérgicas y mantenernos seguros.
- Control de los aditivos: los aditivos alimentarios son las sustancias que se añaden a los alimentos y bebidas en pequeñas cantidades, con el objetivo de mejorar la elaboración y conservación de los alimentos. La mayoría de los alimentos envasados pueden llevar aditivos, estos productos están clasificados como Números E, ¿te suenan? E – 420, E – 414, E – 153, etc. La lista de estos ingredientes está controlada y publicada por la Unión Europea en su Diario Oficial – Reglamento (UE) Nº 1129/2011 de la Comisión de 11 de noviembre de 2011.
Vale la pena recordar además la clasificación de los aditivos:
- Colorantes.
- Conservantes.
- Antioxidantes.
- Estabilizantes, espesantes, emulsionantes.
- Edulcorantes.
- Saborizantes.
A través de internet, tenemos libre acceso y consulta a esta publicación de la UE.
Recomendaciones para aprender a leer las etiquetas correctamente
Habiendo quedado claro el por qué es importante leer las etiquetas correctamente, te damos algunos consejos o recomendaciones para que puedas hacerlo:
- Presta atención a la lista de ingredientes: los ingredientes se enumeran en orden descendente de cantidad, es decir, el primero que aparece es el que más porcentaje de participación tiene sobre el producto final. Opta por productos con ingredientes naturales, que contengan la mayor proporción natural de lo que quieres consumir.
- Comprende la información nutricional: infórmate y acostúmbrate a las pautas diarias de consumo de nutrientes que mejor se adapten a ti: grasas, carbohidratos, azúcares y sodio…. Presta atención a las porciones y compara los valores nutricionales de diferentes productos, para tomar decisiones saludables.
- Ten en cuenta las fechas de caducidad: las etiquetas proporcionan información sobre la vida útil del producto. Asegúrate de comprar alimentos dentro de su fecha de caducidad o, lo que es lo mismo, en su ciclo de vida útil, para garantizar su frescura y calidad.
- Investiga los sellos y certificaciones: algunos productos pueden llevar sellos o certificaciones que garantizan su calidad. Investiga sobre los diferentes sellos para optar por aquellos acordes a tus valores y necesidades.
- Infórmate sobre el país de procedencia.
- Presta atención al CDR (Cantidad diaria recomendada).
- Revisa los aditivos.
Como verás, adquirir la costumbre de leer las etiquetas antes de tomar cualquier decisión de compra hace consumidores conscientes y saludables. ¡Recuerda! El conocimiento es poder y elegir bien es cuidar de nosotros mismos.
Si además de lo que consumes, quieres elegir bien al proveedor de etiquetas adhesivas para tus productos, contáctanos, en Karpay estaremos encantados de asesorarte.